Introducción

En cualquier ciudad, es posible encontrar un ambiente de peligrosidad urbana, donde la violencia y el asalto son una parte habitual del día a día. Si nos encontramos en una situación en la que podemos ayudar a alguien que está siendo asaltado, ¿qué debemos hacer? Es importante tener en cuenta algunas medidas y consejos para actuar de manera segura y eficaz.

Mantener la seguridad personal

Si decidimos intervenir en una situación de asalto, debemos tener en cuenta nuestra propia seguridad. Conviene considerar algunos aspectos importantes como no acercarse demasiado a la persona agresora, no mostrar signos de amenaza y, por supuesto, no responder ante la violencia con más violencia. Contar con medidas de autoprotección como un móvil con GPS o un silbato puede ser una buena forma de estar preparados.

¿Cómo llamar a la policía?

En muchos casos, el asalto sucede en una calle transitada o cerca de alguna tienda o establecimiento. Si nos encontramos en una situación así, lo mejor es llamar a la policía para que sean los profesionales quienes tomen el control de la situación. Lo ideal es tener un móvil con batería o, en caso contrario, pedir ayuda en cualquier establecimiento cercano que tenga teléfono. Podemos llamar al teléfono de emergencias 911 o al número local correspondiente a nuestro país.

Hablar con la persona asaltada

En situaciones de estrés y ansiedad, es probable que la persona afectada se encuentre en shock e incapaz de hablar. Hablar con ella para proporcionar algún apoyo emocional es fundamental para que se sienta tranquila, segura y confiada. Es recomendable mantener una actitud calmada para no empeorar el estado emocional en el que se encuentra. Tampoco es recomendable hacer preguntas innecesarias o intrusivas que puedan hacer que se sienta incómoda o humillada.

Proporcionar ayuda básica

Es posible que la persona afectada tenga alguna lesión o herida tras el asalto. En este caso, es importante tener alguna noción básica de primeros auxilios para poder proporcionar los cuidados necesarios hasta que llegue la ayuda médica. Si no tenemos demasiada experiencia en esta área, lo mejor es no actuar y esperar a que llegue un profesional.

Ofrecer un lugar seguro

Si nos encontramos en un espacio público, lo mejor es esperar con la persona afectada en un lugar seguro hasta que llegue la ayuda. Nunca está de más preguntarle si puede contactar con algún amigo o familiar que pueda ofrecerle una mayor protección y tranquilidad.

¿Cómo realizar un seguimiento posterior?

Una vez superado el incidente, es importante realizar un seguimiento posterior con la persona afectada para asegurarnos de que todo está bien y que se encuentra en un estado adecuado para continuar con su vida. Es posible que necesiten algún tipo de terapia o ayuda profesional para superar el incidente, por lo que es bueno ofrecerles alguna orientación o consejo en este sentido.

Conclusión

Ayudar a alguien que está siendo asaltado puede ser una experiencia estresante y complicada, pero es fundamental para garantizar su seguridad y bienestar. Siempre debemos tener en cuenta nuestra propia seguridad y la de la persona afectada, y seguir los consejos y medidas adecuados para actuar con eficacia y de manera segura. Al final del día, lo importante es que todas las personas involucradas se encuentren en un lugar seguro y protegido.